Es indescriptible lo que siente cuando creas vida dentro de tí, es algo tan tuyo que duele,que abruma,que asusta.
Te sientes tan feliz como vulnerable.
Hay miedo, pues tu vida cambia , tu cuerpo, tu mente y tu ser.
Te vuelves sorprendentemente empoderada de una situación que se te escapa de las manos.
Tu vida se torna en dos, dejas de ser egoísta.
Sabes lo que es el amor, desde el primer momento sabes que es amor verdadero.
Tienes un nombre, tienes ilusiones y tu vida va tomando sentido.
Cada latido, cada ecografía,cada patadita,te da a tí la vida.
Todo iba bien, las revisiones, ecografías y analíticas estaban bien.
30 semanas de embarazo que se paralizan, algo en mamá no va bien y de urgencia te dicen que no hay latido. En esa noche, mi corazón no se paralizó, pero puedo asegurarte que se partió en pedacitos y tu te llevaste uno de ellos contigo.
Hay que inducir un parto con oxitocina cada 4 horas. Dar a luz cuando no hay manera de ver ninguna por ningún lado. Luchar una batalla que ya sabes que está perdida.
Es una de las situaciones mas duras que seguramente te ponga la vida.
Lo quieres conocer y con consentimiento te lo presentan, como dormido,tapado, aún caliente de tus entrañas. En ese momento te das cuenta de que la vida y la muerte no están tan lejos, no distan de una dura realidad. Y eres consciente de que tendrás grabado ese mismo instante para siempre.
Nos dejas los brazos vacíos, un vacío que no se llenará con nada.
Serás nuestro primer hijo, nuestro angelito, que nos cuidara y nos dará fuerzas cuando más lo necesitemos. Espero que te cuiden donde estés como nosotros lo haríamos.
Tu mamá y tu papá te amamos, y te amaremos por el resto de nuestras vidas.